En el mundo del diseño de interiores, los cuadros decorativos juegan un papel fundamental. En realidad, hay diferentes tipos de pinturas decorativas. Así, ayudan a dar un toque único y personal a todos los ambientes, desde cocinas y baños hasta salones y dormitorios. Ya sean grandes murales o pequeñas láminas enmarcadas con estilo, invitan a disfrutar y soñar. ¡Sumate a la tendencia cuadros!
¿Qué son los cuadros decorativos?
Cuando pensamos en cuadros, lo primero que viene a la mente son pinturas de autores famosos o no tanto… ¿o quizás tus propias pinturas? En realidad, son una nueva tendencia en interiorismo. Desde ya, incluyen las obras de arte, pero hay una gran variedad de posibilidades para decorar las paredes. Por ejemplo, láminas, pósters, reproducciones o afiches.
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Más allá de lo que elijas como cuadros decorativos, lo importante es que se adapten a tus gustos y expectativas al incluirlos en la decoración, pero también al espacio disponible. Estos elementos pueden tener un papel protagónico en la decoración de paredes, convirtiéndose en el foco de la atención y definiendo tu personalidad.

Estilos para decorar paredes con cuadros
La variedad de opciones en decoraciones de pared es muy grande: hay alternativas para todos los gustos y presupuestos.
Al elegir la decoración de la pared debemos tener en cuenta varios detalles, como la ubicación, la altura que siempre debe ser la de los ojos, la armonía y el espacio que ocupan.
Por ejemplo, para la cocina se pueden elegir láminas con temática culinaria o imágenes de mercados. El dormitorio admitirá mejor obras abstractas de colores suaves. En tanto, el salón es el lugar para expresarte. ¿Qué es lo que más te gusta? ¿Viajes, libros, diversión? ¡Seguramente encontrarás las láminas o cuadros alusivos!
Algunos estilos son:
- Obras de arte originales. Son piezas únicas creadas por artistas. Pueden ser pinturas al óleo, acuarelas, grabados, dibujos, entre otros. Se diferencian de otros cuadros por su originalidad y valor. Actualmente se pueden adquirir cuadros de autor por valores muy accesibles, en ferias de arte o páginas web. Si optás por esta alternativa seguramente no te arrepentirás.
- Reproducciones. Copias de obras de arte famosas o populares. Son impresiones de alta calidad, en papeles especiales.
- Láminas o posters. Las láminas tienen diversas temáticas, realistas o imaginarias, basadas en fotografías o dibujos. Se deben enmarcar.
- Tridimensionales. Se basan en la superposición de capas, como el arte francés y otras técnicas.
- Afiches. Los afiches son impresiones de gran tamaño con fines promocionales, como afiches turísticos o de películas.
- Caligráficos. Utilizan la caligrafía y tipografía como forma de expresión visual, rescatando la belleza de las letras. Sofisticados y elegantes, proporcionan una conexión cultural.

Consejos para ambientar con cuadros decorativos
Integrar la decoración de pared al diseño de los ambientes puede resultar difícil. Sin embargo, instalarlos y personalizar el entorno es muy sencillo.
Para entender la ambientación con cuadros decorativos debemos alejarnos de la imagen, un poco anticuada, de retratos familiares, o la interpretación clásica de la obra de arte. La idea es que aporten un toque de modernidad, ya sean o no piezas únicas. Seguí estos consejos:
- Ubicar los cuadros en el punto focal. Es un lugar estratégico, donde pretendemos que se dirijan las miradas. Puede ser el centro de la sala de estar o un rincón, pero el protagonismo del cuadro hará que inmediatamente llame la atención.
- Buscar el equilibrio. Se debe tener en cuenta el tamaño de la pared a decorar, que debe estar en equilibrio con las dimensiones del cuadro. Por ejemplo, una pared grande puede albergar varios cuadros. En cambio, un espacio pequeño puede ampliarse con una lámina de colores claros enmarcada.
- Elegir cuidadosamente los materiales. La ubicación depende mucho del material de los cuadros decorativos. Por ejemplo, un cuadro a la tinta no debería recibir demasiada luz natural. Por otra parte, en ambientes húmedos como el baño o la cocina van mejor los cuadros de materiales sintéticos o enmarcados y cubiertos con vidrio.
- Disposición. Los cuadros decorativos pueden organizarse de forma lineal, horizontal o vertical para crear armonía. Por ejemplo, en la decoración contemporánea se utiliza mucho el diseño lineal a partir de trípticos. Los trípticos son tres cuadros que en realidad forman una unidad. Son ideales para colocar sobre la televisión o la cabecera de la cama. En cambio, para el salón se puede elegir un arreglo más aleatorio y descontracturado.
Muralismo, una variante de los cuadros decorativos
Una variante de la ambientación con cuadros decorativos son los murales. Esta tendencia se basa en ocupar toda una pared con uno o varios cuadros. Está inspirada en el muralismo, una corriente artística que se dedica a la decoración de grandes superficies, como fachadas o muros laterales de edificios. ¡Hoy en día, todas las ciudades están llenas de murales! De hecho, se han convertido en un habitante más, ya que están vinculadas a las vivencias y experiencias de los residentes urbanos.
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Los murales pueden estar compuestos por uno o varios cuadros, pero la clave está en ocupar el espacio y armonizar obras y colores. El mural es un recurso novedoso que permite personalizar espacios y darles nueva vida.
El mural decorativo puede representar una única figura o escena. En tanto, si lo componemos con cuadros decorativos, básicamente podemos tomar dos ideas:
- Dividir el mural en varios segmentos y enmarcarlos o colgarlos con separaciones pequeñas, alineándolos de manera horizontal o vertical.
- Crear un mural con cuadros decorativos diferentes pero que formen un conjunto bien pensado. Deben ser de diferentes tamaños y tener un hilo conductor, como la temática o el color. Por ejemplo, varios pósters, láminas y caligrafías en blanco y negro pueden combinar muy bien con un estilo de decoración minimalista o incluso industrial.

Más ideas con cuadros decorativos
Hay muchísimas ideas para ambientar con cuadros. Demos un breve paseo por la casa:
- Habitación de los niños. Se puede elegir una combinación de posters infantiles o, mejor todavía, enmarcar sus propios dibujos y creaciones. Los cuadros decorativos caligráficos también son muy apropiados para el cuarto de los más pequeños.
- Cocina. La cocina es, cada vez más, el lugar de la casa donde se pasa más tiempo. Herencia de los tiempos pandémicos, hay un redescubrimiento de este espacio no solo para cocinar. También para pasar tiempo juntos y hasta para trabajar. Por ese motivo, colgar unos cuadros decorativos puede hacerla todavía más alegre y confortable. ¿Mencionamos motivos culinarios o mercados? Los caligráficos son especiales, con palabras tentadoras como café, desayuno, nombres de condimentos o lo que tu imaginación te dicte.
- Baño. Si decorar el baño con plantas es tendencia, podemos sumar cuadros decorativos con motivos botánicos.
- Dormitorio. El dormitorio se presta para composiciones murales con cuadros decorativos o incluso una gran pintura mural. Lo más importante es que los colores y motivos sean armónicos y ayuden al descanso y la relajación.
- Exteriores. ¿Pensabas que no se podían colgar cuadros decorativos afuera? En realidad, los cuadros exteriores pueden alegrar y vestir un espacio como el patio, balcón o la terraza, cambiando completamente la percepción del ambiente. Los cuadros decorativos para exterior deben cumplir con la condición de no deteriorarse a la intemperie. Así, se deben elegir cuadros decorativos de chapa, metal o materiales impermeables, resistentes a la radiación solar y que no permitan la proliferación de hongos o musgo.
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Hasta acá llegamos con la nota: «Cuadros decorativos, nueva tendencia en interiorismo». Esperamos que te haya sido útil. Recordá que en Zuba somos especialistas en ofrecer asesoramiento para inversiones inmobiliarias. Contactanos para más información.
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